EL VIRUS DE LA ACTITUD
El video en mención destaca la importancia de la comunicación en los lugares de trabajo, es así como los cambios en la actitud rompen las fronteras de la comunicación afectando de esta manera la meta de las organizaciones; se pueden observar algunas clases de actitudes negativas en las personas del entorno laboral como son:
- Alterado: Es aquella persona que reacciona de una forma tensa a las situaciones de problema que se presentan en su entorno laboral.
- El perfeccionista: Exagera la forma de presentar informes, o la manera de desarrollar las actividades escudándose en el impacto de la Calidad sobre esto.
- El resistente: Es aquella persona renuente a afrontar los cambios que van a traer beneficios para la compañía, de esta manera solo acepta las viejas políticas.
- Ese no es mi trabajo: Solo se dedica a sus actividades puntuales y no contribuye al desarrollo de otras que puedan estar afectando la meta de la empresa.
- El esparcidor de rumores: Se dedica a hablar de mas sobre temas que pueden generar tensión en los demás.
- El no comprometido: No le importa mucho el objetivo de su labor, por lo cual no hace bien el trabajo que le corresponde mostrando problemas de responsabilidad.
- El pesimista: Es una actitud grave frente a un equipo de trabajo pues esto genera desmotivación y conflicto entre los mismos.
Una vez se pueda evidenciar actitudes como las anteriores, es importante que la etapa de eliminación del virus, inicie con reconocer el problema y tomar medidas al respecto, pero medidas convencionales no arbitrarias, las cuales aumenten el estado actual del problema.
Dentro de las medidas convencionales se puede optar por entablar comunicación con la persona afectada, de esta manera es importante que se le destaque la importancia de su actitud frente a la compañía y de cómo esto afecta la consecución de las actividades, también se debe destacar la importancia de su compromiso y de cómo este es vital para el trabajo en equipo. De esta manera se busca llegar a un acuerdo que permita las mejoras pertinentes en la actitud de la persona afectada.
Mejorar la forma de expresión cuando se está refiriendo a otro miembro de la organización, así este sea subordinado, permite atacar el virus y desinfectar la empresa que para este caso es la afectada.
La etapa de la supervisión luego de pactar la solución al problema de actitud, es de gran importancia, en ella se destaca la labor que la persona ha realizado y como esto ha contribuido para mejorar y dar cumplimiento a la meta de la empresa.
Los problemas personales, pueden estar afectando las relaciones en el entorno laboral, es por ello importante contar con personas que puedan reconocer el virus de la actitud en las compañías, de esta manera se puede dirigir la persona afectada, escuchando sus problemas e indicándole la posible solución a los mismos.
Conocer de antemano que se está afectando la consecución de las actividades es el primer paso para las personas que presentan síntomas del virus, el siguiente es el cambio a estas actitudes, una vez el equipo de trabajo observa el cambio presentado se genera un entorno excelente para el clima laboral.
El virus de la actitud es el principal desencadenante de la improductividad en las organizaciones, al existir un mal clima laboral las actividades se van a ver afectadas y con ello la eficiencia y productividad de la empresa; por ello se reconoce la importancia de que las organizaciones del día de hoy se acerquen cada vez más a su recurso humano, ¿de qué manera?, bueno considero que es importante evaluarlos en su entorno laboral y conocer si hay virus de la actitud, de esta manera una vez se obtenga un análisis del recurso humano, se podrá aplicar los pasos para atacar dicho virus.
Con todo ello he obtenido aportes para mi vida personal, pues bien puedo concluir que el virus de la actitud no solo afecta los entornos laborales haciendo que se reduzca la productividad de la empresa; es también un problema raíz de las relaciones personales y vida de pareja, cuando este virus ataca, manifestado en las actitudes descritas anteriormente, es el inicio de una epidemia que puede estar acabando con la paz interior y exterior de una familia. Es así como este virus también se manifiesta en la salud de la persona y se dan síntomas como: dolores de cabeza, molestia general, hipertensión, gastritis, entre otras enfermedades que hoy día son comunes en las personas afectadas por el virus de la actitud.
Finalmente descato este video como aporte a mi vida personal, pues como todas las personas tenemos una personalidad única, pero que no debe confundirse con nuestras actitudes que pueden poner en riesgo relaciones transcendentales en nuestras vidas cotidianas.